La suerte desde tiempo atrás viene considerada como el resultado positivo ante una situación o circunstancia poco probable y que manifiesta alegría a quién la recibe. No obstante, también es definida por otra parte de la sociedad como hechos que se consideran al azar o casualidades, o bien, situaciones que son provocadas por personas dedicadas a la magia para atraer la buena suerte a sus vidas.

Particularmente, voy a dar mi libre opinión ante tal definición de la SUERTE.

Llevo cinco años integrando cada aprendizaje que vivo, observando desde mi interior todo lo que acontece a mi alrededor, llamando a mi consciencia en silencio y escuchándola para que me ayude a transitar este camino llamado VIDA. En ese trayecto he experimentado muchos escenarios, me he encontrado con multitud de dificultades y la vida me ha entregado personajes de diferentes colores y sabores para poder entender o al menos, intentarlo, el por qué de muchas situaciones que he vivido. Desde este punto de vista, ¿qué es la suerte?  ¿Podemos definir la suerte a la persona que transita por más y mejores situaciones positivas que una persona que camina por experiencias más negativas? Pongamos un ejemplo: seguro que una persona que no tiene dinero y le toca la lotería, piensa; «que suerte he tenido», sin embargo, para otra persona que no tiene dinero y no le toca la lotería, piensa; «que mala suerte tengo». Desde el punto de vista espiritual, mirando al ser, todo tiene su explicación. Ambas partes están transitando por el camino que tiene su alma, las dos tienen suerte, porque todas las situaciones que viven sirven para la evolución de su alma, integrar su aprendizaje para vivir en armonía con su ser.  En este caso, todas las personas deciden jugar a los juegos de azar, porque creen que así serán más felices y se pierden otros valores que el Universo les entrega en cada momento de su existencia.

Hay estudios que demuestran que existen personas que son afortunadas en sus vidas y sin embargo no son felices, ¿podría decirse que aun teniendo todo lo que quieren, tienen suerte? Seguramente si lees esto te lo preguntarás a ti mismo, ¿tengo suerte o no? Es decir, ¿la suerte viene dada por lo que uno tiene? Si quieres ser actor y de repente estás estudiando para ello, eres disciplinado con tus estudios, ¿quiere decir que seguramente lo consigas antes que uno que no lo hace? ¿y eso se llama suerte? De una empresa que tiene cincuenta currículums y entre ellos están dos personas, una que se implica y otra que no, pero sorprendentemente contratan a la persona que no es disciplinada, ¿significa suerte? La definición expuesta al principio, sería considerada como un Sí rotundo, pero ¿es suerte o es el trazado de su alma? ¿Será que la otra persona tiene que integrar un aprendizaje? ¿y no se llamaría suerte?

Estudiando la reflexión que acabo de comentar, quiero hacer una breve descripción de lo que es para mí la suerte.

Suerte es la propia vida, con circunstancias positivas o negativas, porque todo lo que nos ocurre viene marcado por el trazado de nuestra alma. Nadie puede controlar la vida, lo que nos pasa, lo que nos sucede, las experiencias que tenemos que vivir. Si crees que tienes que comprar romero para tener buena suerte o tienes que visitar mediums o videntes para atraer la buena suerte, o tienes que jugar a los juegos de azar para arreglar tu vida, lo siento, pero desde mi humilde opinión creo que no es el camino, aunque es muy bello que transitemos por todas las situaciones, y eso también se llama SUERTE.

TE DESEO TODA LA SUERTE DEL UNIVERSO PARA QUE ESCUCHES LA VOZ DE TU ALMA Y SIGAS VIVIENDO ESTA MARAVILLOSA VIDA CON TODOS LOS ESCENARIOS Y PERSONAJES QUE TE AYUDEN A TRANSITARLA.

-Elísabeth Pérez-